Luego de meses de negociaciones, de hacer intentos de desalojo, de casos de problemas de salud de niños y adultos, incluso casos de personas muertas, se logró iniciar el proceso de traslado desde el parque Nacional hasta sus lugares de origen de los más de 200 indígenas que estaban ubicados en este lugar en la ciudad de Bogotá.
La decisión se toma, luego de una intensa reunión donde el gobierno se comprometió a darle un subsidio de vivienda a las familias indígenas que durante meses estaban asentadas en el parque nacional, provenientes de Chocó y Risaralda.
Así lo anunciaron desde la Unidad de Víctimas en Bogotá.