A pesar de las inclemencias del clima familias indígenas llegaron a sus territorios
La Unidad para las Víctimas, el Ministerio del Interior, la Alcaldía Mayor de Bogotá, las administraciones municipales de Pueblo Rico y Bagadó y la Policía Nacional, entre otras entidades, hicieron realidad el retorno de 85 familias embera que se encontraban en difíciles condiciones de subsistencia en Bogotá, hasta sus hogares en los departamentos de Risaralda y Chocó.
De las 85 familias conformados por 254 personas, 25 regresaron a territorio risaraldense resguardo Gitó Dokabú, en la veredas de Kuna Gitó, Kemberdé, Yoraudo, Santa Marta y Chifá, mientras los demás hicieron lo propio hacia Bagadó, en Alto Andágueda, territorios de Aguasal, La Y, Oscordó, Conondó, Uripa, Masura, Cascajero, Mentuará, Cebedé y Río Colorado.
Este nuevo grupo de familias, que se encontraba en los albergues de La Rioja y La Florida en Bogotá, retornaron de la mano de la Unidad a sus departamentos de origen.
Esto dijo Jhonatan Forero, coordinador del grupo de retornos de la unidad para las Víctimas
El grupo de Retornos destacó que desde el mes de diciembre se han acompañado cuatro fases de retorno. En total han regresado a sus tierras ancestrales 477 familias, 1.442 indígenas, principalmente a municipios de Chocó y Risaralda.
Las familias llegaron hasta el polideportivo de Santa Cecilia para recibir su alimentación, el kit de hábitat, el dinero de sostenibilidad y emprender rumbo a sus hogares a lomo de mula, algunas ubicadas en sitios a cinco horas del lugar de desembarque.