Economía

Proyecto productivo de Marsella abastece al PAE con innovación agrícola

Un grupo de jóvenes estudiantes está revolucionando la forma de aprender. Con sus manos llenas de tierra y sus mentes llenas de sueños, han convertido un invernadero en un aula viva, donde la teoría se transforma en práctica y la educación se siembra junto a cada tomate.

El Instituto Agrícola de Marsella ha puesto en marcha un proyecto innovador que combina la agricultura con la educación, demostrando que la escuela puede ser mucho más que un espacio cerrado. En un invernadero de 1.000 metros cuadrados, equipado con tecnología de punta, los estudiantes cultivan tomates de alta calidad, que luego son entregados al Plan de Alimentación Escolar (PAE).

Esto dijo el gobernador de Risaralda, Juan Diego Patiño.

Este proyecto no solo abastece de alimentos saludables a la comunidad, sino que también ofrece a los jóvenes una oportunidad única de aprender sobre agricultura sostenible, trabajo en equipo y el valor del esfuerzo. La experiencia del Instituto Agrícola de Marsella es un ejemplo inspirador de cómo la educación puede ser transformadora explicó Julio César Pescador Trejos, rector de la institución.

El invernadero se ha convertido en un laboratorio natural donde los estudiantes aprenden sobre diversos temas, desde la botánica hasta la economía. Los sistemas controlados de riego, temperatura y protección contra plagas permiten a los jóvenes experimentar con diferentes técnicas de cultivo y comprender los desafíos y las recompensas de la agricultura.